Las especies de Mundomar combaten la ola de calor con refrescantes y nutritivos helados. El parque ha activado su protocolo para hacer frente a las altas temperaturas y garantizar el bienestar de los animales.
En Mundomar, el parque de naturaleza de Benidorm, el bienestar de sus animales es lo más importante, por lo que se ha activado el protocolo para hacer frente a las altas temperaturas que azotan, en su gran mayoría, al territorio nacional.
Una de las medidas de dicho protocolo, diseñado por los cuidadores y veterinarios del parque, contempla el suministro de suculentos y refrescantes helados entre las distintas especies de animales del complejo.
Estos jugosos bocados se realizan con un alto porcentaje de agua (hielo) junto al alimento propio de cada animal, como puede ser la fruta y las verduras en el caso de los lemures, el pescado para las nutrias o la carne para los suricatas.
De este modo, se consigue que estos ingieran su dieta, con un aporte extra de hidratación para plantar cara al calor de un modo saludable y divertido.
Y es que, para todos los habitantes de Mundomar, la degustación de estos “polos” se enmarca en otra práctica habitual en el complejo de naturaleza, conocida como “enriquecimiento ambiental” cuyo objetivo es fomentar ciertas conductas que garantizan el bienestar
animal.
Estos helados tan especiales se ofrecen de una manera muy divertida, casi como un juego para los propios animales que conforman la gran familia de Mundomar.
Dentro de dichos “enriquecimientos ambientales”, los helados son del tipo alimenticio puesto que, pese a satisfacer las necesidades nutricionales de los animales, la comida se presenta de modo distinto y cada una de las especies debe utilizar una estrategia diferente para lograr comerse el helado (abrirlo a mordiscos, derretirlo en el agua, romperlo en fragmentos más pequeños al tirarlo desde altura…).
Este tipo de acciones también cuentan con un componente sensorial, dado que el contacto con la superficie fría del hielo es una sensación diferente para ellos que estimula sus sentidos.