Terra Natura Benidorm recibe la llegada por primera vez de un margay a sus instalaciones. Se trata de una de las dos únicas especies de felino del mundo que puede rotar su tobillo para descender de los árboles con la cabeza hacia abajo.
El parque de naturaleza y animales Terra Natura Benidorm ha recibido la llegada, por primera vez, de un margay (Leopardus wiedii) a sus instalaciones. Se trata de una de las dos únicas especies de felinos que existen en el mundo con capacidad de rotar el tobillo, al igual que lo hace la pantera nebulosa. Esta curiosa característica permite a este felino descender de los árboles con la cabeza hacia abajo, como hacen las ardillas.
Esta nueva hembra, que se llama Lecia, procede del zoológico de Liberec en la República Checa. Tiene algo más de un año de edad y pesa cerca de 2,5 kilos. Esta especie se encuentra catalogada de casi amenazada, según los datos de la UICN, debido a que sus poblaciones se encuentran en claro declive. Por otro lado, su comercio está regulado por la CITES.
Por ello, esta especie cuenta con un Programa Ex Situ de la EAZA, creado para controlar y manejar la población de esta especie en cautividad y asegurar así su futuro. Terra Natura Benidorm forma parte del EEP de esta especie. Dentro de este proyecto de Conservación y manejo de poblaciones animales, el parque de naturaleza espera incorporar próximamente a un macho de margay con el objetivo de lograr la reproducción de esta especie junto a Lecia.
Al llegar a Terra Natura Benidorm, el equipo de veterinarios ha realizado una revisión visual para comprobar su estado general y evitar producir estrés al animal. Durante la observación, se ha comprobado que tenga un buen pelaje, buen color, que no tenga heridas y que su comportamiento sea normal. En los próximos días, se mantendrá en observación al animal para ver si come adecuadamente.
El público podrá visitar a Lecia en su instalación en el área ambientada en el continente americano de Terra Natura Benidorm. Los margays son felinos pequeños y moteados que se asemejan a los ocelotes. Esta especie destaca por su destreza a la hora de escalar y su querencia arbórea.
Se mantienen activos durante el día y la noche, y suelen ser animales solitarios que constituyen lazos de pareja temporales, que se forman en la temporada de reproducción. Se alimentan de una amplia gama de presas, entre los que destacan mamíferos terrestres y arbóreos, aves y sus huevos, anfibios, reptiles, así como artrópodos e incluso a veces ingieren fruta.
La presión de la caza furtiva sobre esta especie ha disminuido considerablemente gracias a la protección internacional, aunque todavía se producen casos. El uso prácticamente exclusivo del hábitat boscoso puede hacer que el margay sea más vulnerable que otros felinos, como los ocelotes, debido a los efectos negativos de la destrucción y fragmentación de su hábitat.