Bioparc Valencia conmemora el Día del Medio Ambiente con el nacimiento de un primate en grave peligro de extinción. Naciones Unidas declaró el 5 de junio como el Día Mundial del Medio Ambiente. Una fecha que sirve para llamar la atención sobre nuestra relación con la naturaleza y nuestro entorno. Este año se marca como un punto de inflexión con el lema “Reimagina, recupera, restaura” porque “somos la generación que puede hacer las paces con la naturaleza”. Además, precisamente este día arrancará el Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de Ecosistemas (2021-2030).
Bioparc nació con el objetivo de concienciar sobre la necesidad de conservar la naturaleza y se une a esta llamada de Naciones Unidas que proclama: “Es nuestro momento”. Y justo esta semana no podía celebrarse de mejor forma, con una nueva vida, especialmente al tratarse de una especie en grave peligro de extinción. El nuevo “bebé” es un mangabey de coronilla blanca (Cercocebus lunulatus) y ya se encuentra a la vista del público bajo los continuos cuidados de su madre cuyo alentador nombre es Hope.
Conocidos como “monos de la raya en el ojo”
Esta peculiar especie de primate africano se le conoce como “mono de la raya en el ojo” y está incluida en la tristemente famosa lista roja de la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) como “En peligro”. En la naturaleza su presencia está restringida a la parte norte del golfo de Guinea, en la costa occidental del continente, zona clasificada como “caliente” por su biodiversidad. En este sentido, las acciones de conservación ex situ que se llevan a cabo con los programas de reproducción en cautividad en los que participa Bioparc, suponen un pilar importantísimo en la supervivencia de la especie. El otro pilar es la preservación in situ que se realiza a través de la Fundación Bioparc con el proyecto WAPCA en Ghana.
En Bioparc podemos contemplarlos en la zona que recrea los bosques de África Ecuatorial, compartiendo hábitat con los gorilas. Los mangabeys utilizan el movimiento de sus característicos párpados blancos para comunicarse, son diurnos, de locomoción cuadrúpeda y pasan el 70% del día en el suelo. Poseen unas mandíbulas muy poderosas que utilizan para partir las cáscaras de frutos secos y emiten potentes vocalizaciones para mantenerse en contacto. Viven en grupos y habitan en bosques de galería, palmerales, manglares y se suelen asociar con monos arbóreos para alimentarse de las frutas que se les caen.
Bioparc Valencia conmemora el Día del Medio Ambiente con el nacimiento de un primate en grave peligro de extinción